Un año de devastación: crímenes atroces sin precedentes y el sufrimiento en el Territorio Palestino Ocupado e Israel

Un año de devastación: crímenes atroces sin precedentes y el sufrimiento en el Territorio Palestino Ocupado e Israel

Comunicado de AIDA (Asociación de Agencias Internacionales de Desarrollo), 3 de octubre de 2024

A lo largo del último año, hemos emitido innumerables declaraciones alertando al mundo sobre la terrible situación que se desarrolla en Gaza. En cada ocasión se repetía el mismo mensaje, con cifras actualizadas, que reflejan los horrores infligidos a los palestinos, sin posibilidad de encontrar nuevas palabras para describir la magnitud de lo que estamos presenciando. En este primer aniversario, elegimos no repetir esas advertencias. Lo que queremos decir es simple: nunca imaginamos que el mundo permitiría que este horror continuara tanto tiempo, o que Israel actuara con tanta impunidad.

Estos últimos 12 meses no solo son un reflejo de la brutal violencia infligida a los palestinos, sino también una apelación a nuestra humanidad colectiva. Refleja el fracaso del orden internacional, particularmente de las naciones poderosas cuya inacción y complicidad con las acciones de Israel han agravado el sufrimiento palestino y destruido las normas internacionales. Este fracaso va mucho más allá de Gaza, socavando los mismos cimientos de lo que la comunidad global ha luchado por defender desde su creación.

Hace casi un año, las autoridades israelíes declararon un «asedio total» sobre Gaza, con el ministro de defensa anunciando públicamente: «No habrá electricidad, no habrá comida, no habrá combustible, todo estará cerrado». Esto exacerbó el sufrimiento causado por un bloqueo de 17 años, y una ocupación deshumanizante e ilegal que ha durado décadas, restringiendo severamente el flujo de personas, bienes esenciales, servicios y ayuda humanitaria, y castigando colectivamente a toda una población civil.

En el último año, las acciones militares de Israel -incluidos bombardeos indiscriminados y constantes y ataques aéreos- han matado y mutilado a civiles palestinos, incluidos niños, en cifras récord. La destrucción generalizada de la infraestructura de Gaza, incluidas escuelas, hospitales y hogares, ha llevado a su sistema de salud al colapso y ha hecho casi imposible el acceso al agua potable, propagando enfermedades. La hambruna ha sido utilizada como método de guerra, con Israel restringiendo la entrada de alimentos, combustible y medicinas. El desplazamiento forzoso ilegal y continuado de millones de palestinos ha borrado cualquier sentido de seguridad o dignidad, reduciéndolos a espacios cada vez más pequeños a medida que las áreas designadas como humanitarias por el ejército israelí se han reducido a solo el 11% del territorio del enclave, fragmentando aún más las comunidades. Estas atrocidades, en clara violación del derecho internacional, han causado una catástrofe humana sin precedentes, dejando a los palestinos en ciclos de desplazamiento, sufrimiento y privación. Una generación de niños ha quedado huérfana, mutilada y traumatizada, con impactos que perdurarán por generaciones, incluso si se logra un alto el fuego. La devastación en Gaza continúa generando efectos desastrosos, desestabilizando la región e impactando la paz y seguridad global, con consecuencias que se sienten mucho más allá de sus fronteras.

Los ataques del 7 de octubre del año pasado, liderados por grupos armados palestinos contra israelíes, fueron un recordatorio devastador de los ciclos de violencia que no muestran signos de disminuir. El ataque deliberado contra israelíes causó un sufrimiento inmenso, trauma y pérdida de vidas. Estos actos han dejado cicatrices profundas en innumerables familias y comunidades, y los condenamos inequívocamente. Al recordar a quienes perecieron, hacemos un llamado a un alto el fuego inmediato y a la liberación de todos los rehenes y los miles de civiles detenidos ilegalmente—sean israelíes o palestinos. La protección de los civiles debe ser una prioridad compartida para todos, y es imperativo que el derecho internacional se respete en todos los casos.

Las Naciones Unidas han reportado un número sin precedentes de niños muertos y mutilados en los territorios palestinos ocupados e Israel en 2023, marcando el año con la mayor cantidad de violaciones graves contra niños en todo el mundo desde que comenzaron los registros. Los datos de 2024 revelarán aún más realidades horribles. Como trabajadores humanitarios, enfrentamos inmensos riesgos al intentar entregar ayuda en condiciones extremas. Más compañeros han sido asesinados en Gaza en el último año que en cualquier otro año de conflicto, en cualquier parte del mundo. Desde el 7 de octubre, más palestinos han sido asesinados en Cisjordania que en los seis años anteriores a esta fecha.

La ocupación militar israelí ilegal, prolongada y beligerante del territorio palestino sigue despojando al pueblo palestino de sus derechos, desafiando a los organismos legales internacionales con un número creciente de violaciones del Derecho Internacional Humanitario y el Derecho Internacional de los Derechos Humanos, incluidos los asesinatos y mutilaciones generalizados de palestinos, la destrucción de sus hogares, escuelas e infraestructura esencial para la vida. Además, según la Corte Internacional de Justicia, existe el riesgo de que los derechos palestinos estén siendo violados bajo la Convención sobre el Genocidio. Israel debe cesar cualquier acción que contribuya a ello. Los Estados tienen la obligación de prevenir el genocidio, incluyendo la suspensión de cualquier suministro de armas o asistencia militar que pueda ser utilizada por Israel en tales actos. El incumplimiento de la decisión de la CIJ, así como la reciente votación histórica de la Asamblea General de las Naciones Unidas, enviará el mensaje de que los Estados pueden ser selectivos en la aplicación del derecho internacional, lo que solo alimentará la impunidad de Israel.

Al marcar un año de devastación y el castigo colectivo de toda una población civil, nos unimos en duelo colectivo y condena por los crímenes atroces cometidos en los últimos 12 meses. Aún no es tarde para que la comunidad global actúe. Instamos a los líderes a implementar un alto el fuego, proteger a los civiles, garantizar el acceso humanitario, asegurar la liberación de los rehenes y de los civiles detenidos ilegalmente, abordar las causas profundas del conflicto, hacer cumplir plenamente el derecho internacional, incluido detener la exportación de armas a las partes en conflicto, garantizar la rendición de cuentas mediante la activación de mecanismos internacionales, apoyar las investigaciones sobre estas atrocidades y trabajar genuinamente hacia el fin de la ocupación ilegal de Israel.

Si el mundo continúa emitiendo condenas vacías, los principios del derecho internacional seguirán debilitándose o siendo ignorados, y corremos el riesgo de establecer un peligroso precedente para futuras atrocidades, socavando mecanismos internacionales de justicia y paz. ●

*ACPP es parte de la Asociación de Agencias Internacionales de Desarrollo (AIDA)

Si quieres leer el comunicado en su versión originalhttps://aidajerusalem.org/download/aida-statement-one-year-of-devastation-marking-the-unprecedented-atrocity-crimes-and-suffering-in-occupied-palestinian-territory-and-israel/ 



Traducir »